Adiós amigo mío

Se escurría lentamente la madrugada del 2 de mayo, el feriado había dejado consigo montones de promesas y discursos por parte de diferentes personajes y sindicatos.

A veces las palabras sobran y muchas veces ni siquiera hacen falta, sin embargo hubiera querido encontrar la palabra necesaria para que podamos seguir bien, no la encontré, quizás ni siquiera exista... Las palabras creo que nunca podrán describir esa extraña sensación que sentí cuando terminó nuestra charla. Confusión? Dolor? Frustración? Incertidumbre?

No me cuesta remontarme años atrás para ver como nos conocimos y no me cuesta imaginar como hubiéramos seguido. Creo que después de todo la vida tiene sus vueltas y las personas solemos separarnos a través de sus distintos caminos.

Con seguridad algún día en un futuro incierto nos crucemos en alguna de las tantas avenidas y al cruzar nuestras miradas seamos desconocidos. Adiós amigo mío...